Con el 40 mayo a la vuelta de la esquina en Madrid suben las temperaturas que da gusto. De la noche a la mañana pasamos de “¡Qué bien ya llega la primavera!” a “¿Ya estamos en verano?” Y es que ya se sabe… En Madrid no tenemos términos medios. De Madrid al cielo hay un paso, pero vivimos 9 meses de invierno y 3 de infierno; por lo menos para nuestras mascotas. Por esa razón hoy os vamos a dar 5 buenos consejos para que perro y calor hagan buenas migas este verano.
Perro y calor, ¿cómo le afecta?
El calor de Madrid tiene unas características muy claras. Se trata de una ciudad de interior, con lo cual tenemos que lidiar con altas temperaturas (no es extraño alcanzar lo 35º y hasta 40º) y un bajísimo nivel de humedad. Estas condiciones alteran a todo el mundo sin importar que caminemos sobre dos piernas o a cuatro patas. De hecho, nuestros perros también son susceptibles de sufrir deshidratación o verse a afectados por un golpe de calor. A esto debemos añadir un agravante. Los perros, en general, tienen mayores dificultades para regular su temperatura corporal. Ellos no sudan como nosotros lo hacemos, sino que liberan el calor por la boca y en menos medida por la cara y las orejas. ¿Sabías que los canes no tienen glándulas sudoríparas en su piel? Pues no, las tienen en sus patas. En las almohadillas de sus patas concretamente.
Con estas características físicas, los dueños de los canes deben poner especial cuidado en ellos cuando las temperaturas ascienden.
5 consejos para lidiar con perro y calor.
En «Más de Madrid» nos hemos dirigido a una clínica veterinaria y hemos preguntado por las rutinas más aconsejables en verano de cara a prevenir las consecuencias del calor en nuestros perros.
- Sabemos que el juego, el ejercicio y salir a pasear es fundamental para nuestro perro, pero en verano hacerlo durante las horas centrales del día puede ser fatal. Por eso evítalas y madruga. A primera hora de la mañana, las temperaturas en Madrid son las más bajas del día.
- Que nunca falte agua fresca y limpia en su bebedero. Esta es una norma durante todo el año, con más razón durante el verano. No te preocupes por si bebe mucho, la eliminará.
- Refréscale. Si cuando hace excesivo calor te refrescas con agua fría y mojas tu cabeza y articulaciones, a tu perro también le agradará este tratamiento. No lo dua y refresca cona agua su cabeza y cuerpo.
- El pelo de tu perro debe tener el largo ideal, ni demasiado largo, porque le dará mucho calor, ni demasiado corto, porque el pelo hace una labor de aislamiento de las inclemencias, también del calor.
- Prepárale helados caseros. Con su pienso seco preferido y agua puedes preparar unos helados perrunos de rechupete. Le referescarán y le encantarán. Eso sí, acuérdate de pasarlos por el agua antes para que no se le peguen a la lengua.
Cuando hace mucho calor es posible que tu perro comience a sentirse mal. Si notas que pierde el equilibrio (mareos) respira con dificultad, jadea, no puede caminar y su temperatura corporal es muy alta, probablemente esté sufriendo un golpe de calor. Es un problema grave y deberás actual con celeridad. Esperar a llegar junto al veterinario puede ser demasiado tarde.
Lo primero debes hacer es bajar su temperatura. Para ello mantenle a la sombra y en un lugar lo más fresco posible. Después rocíale con agua y dale de beber. Te ayudará a su recuperación poner hielo en su cabeza y abdomen. Una vez estabilizado, ahora sí. ¡Visita al veterinario!
La mayoría de los golpes de calor de los perros ocurren en el coche. Los automóviles en verano alcanzan altísimas temperaturas en poco tiempo. Evita dejar a tu perro dentro. No importa si sólo van a ser unos minutos. ¡Con aparcar a la sombra y con la ventanilla bajada no basta!
Siguiendo estos consejos podrás estar seguro de que el perro y el calor van a llevarse bien. Ahora toca. ¡Difrutar del verano en Madrid!